martes, 2 de abril de 2013

La reinvención de las cosas


Hoy les propongo que hablemos sobre la reinvención de las cosas. Para analizar este tema me baso en una entrevista que leí en la revista del Instituto Tecnológico de Massachusets , MIT Review para ser exactos. Era un artículo que contaba cómo 2 emprendedores habían reinventado el termostato. Estos dos cerebros tecnológicos, que dicho sea de paso venían de ser parte del equipo que creó el Ipod y el Ipad de la mano de Steve Jobs, un día habían ido a comprar un termostato y se encontraron con que los que había en el mercado eran muy caros, horribles y para nada eficientes. Con lo cual, uno de ellos se paró y dijo: “Espera un segundo, voy a diseñar uno.”
Lo que siguió fue la reinvención del termostato. Reinventó uno que se puede operar desde un smart phone y que es lo suficientemente inteligente como para aprender sus rutinas de acuerdo a cuál sea la temperatura habitual que el dueño de casa utilice. Que puede aprenderse el horario en que habitualmente es usado para apagarse automáticamente en momentos en que no haya nadie en casa. Pero al mismo tiempo prenderse un par de horas antes de que vuelvan los ocupantes de la casa para mantener el calor en la casa. Logrando funcionar de manera más eficiente y además ahorrándole a los dueños de casa un monto considerable de luz. Además de otras funciones adicionales que no tiene sentido contarles en este micro.
El punto que me llamó la atención y que despertó mi admiración es cómo una persona ante un problema cotidiano y simple como es elegir un termostato para su casa utilizó su imaginación y sus conocimientos para “reinventar” lo que ya estaba inventado.
La definición de Inventar que aparece en el diccionario Word Reference dice: “Hallar o descubrir una cosa nueva o no conocida.” Y la definición de Reinventar dice: “Volver a inventar.”
Contrariamente a este concepto, pareciera que para nosotros, simples mortales, a veces lo que ya está inventado, aquello que ya es de una manera no puede ser reinventado.
Bueno queridos oyentes, parece que se puede. Se puede volver a inventar un artefacto y darle una funcionalidad muy superior o mejor o distinta a la que ya conocíamos. Y si se puede reinventar un termostato ¿se podrá  reinventar un trabajo o una pareja o una amistad? No cambiarlo por otro. Simplemente reinventarlo, que sea distinto, que tenga otras funciones, que nos guste más.
O ¿por qué no, reinventarnos a nosotros mismos? Y para toda la gente que ya estaba acostumbrada a esperar de nosotros que seamos unos tímidos o que seamos unos soberbios o unos débiles. O que tengamos mal humor, o que seamos muy buenos. O que seamos torpes para la tecnología pero muy buenos en el tenis.  ¿Podremos reinventarnos? ¿Salir a la calle de otra manera? ¿Inventarnos unas funciones nuevas?
Cuando no nos guste alguna parte de nuestra vida podemos hacer como hizo el ingeniero que reinventó el termostato y decirnos a nosotros mismos: “Esperá un segundo, voy a diseñar una vida que me guste más”. ¿Se podrá?
Ustedes ¿qué opinan queridos oyentes? ¿Nos reinventamos? Esta es mi propuesta.
Vicky Detry

No hay comentarios:

Publicar un comentario